La regulación de la movilidad y el futuro del libre uso de internet en Colombia no pueden definirse bajo la amenaza de las vías de hecho y en favor de viejos monopolios que controlan y se lucran de los cupos de taxis.

El camino que pretenden tomar el Ministerio de Tecnologías de la Información, el Viceministro Enrique Nates y el Superintendente Javier Jaramillo no sólo sacrifica la libre competencia, sino que condena la innovación tecnológica en el país a un futuro de incertidumbre jurídica. De bloquear cualquier aplicación de internet el MinTIC atentaría contra el libre uso de la red y el futuro del emprendimiento tecnológico en Colombia.

Además, es preocupante la sola pretensión de una Ley, como la impulsada por el Viceministro y el Superintendente de Transporte, que persiga al ciudadano por ejercer su derecho a escoger libremente una alternativa de movilidad segura, confiable y eficiente.

Invitamos al Ministerio de Transporte a reconsiderar esa iniciativa y en su lugar escuchar a los cientos de miles de Colombianos que claman por una regulación para alternativas como Uber. Una vez más, nos ponemos a su disposición para aportar en la construcción de un nuevo marco reglamentario, como lo hicimos recientemente en colaboración con el Gobierno de la Ciudad de México.