Recorriendo Santiago con Constanza

Constanza Vega tiene 28 años, es ingeniera eléctrica y desde junio de 2015 decidió hacer un cambio en su vida laboral. Ideó su propia empresa relacionada a su profesión pero necesitaba recursos para comenzar su emprendimiento. Así, decidió unirse a Uber arriba de un llamativo Peugeot 208. Poco a poco, consiguió mejores ingresos para invertir en su empresa.

Desde entonces, de lunes a viernes se levanta temprano para trabajar las 10 horas diarias que se propone. Según cuenta, lo que más disfruta de ser socia conductora es la posibilidad de manejar sus propios tiempos. “Lo que me ha ayudado mucho es el horario. Yo puedo hacer las dos cosas paralelamente. Si yo dejo de trabajar un rato porque tengo que hacer algún trámite después, uno ve cuando sigue trabajando”, cuenta Constanza.

Una de las anécdotas más divertidas le pasó durante la activación de #UberIceCream en Santiago. “Me tocó ir a entregarle helados al “Guatón” Salinas. Él trató de darme un beso y fue una situación muy divertida. Hasta quedó grabado en un video que está en las redes sociales de Uber”, recuerda Constanza.

Con su emprendimiento ya en marcha, Constanza está muy agradecida de ser socio conductora de Uber, incluso muchos de sus amigos le comentan de lo entretenido que es su trabajo. Así ella puede tener un horario flexible y seguir con su emprendimiento en marcha, teniendo además una importante fuente de ingreso para sacarlo adelante. Constanza seguirá conduciendo su auto rosado por las calles de Santiago.